Madera Termotratada.

La madera termotratada es una solución ecologica, sostenible y respetuosa con el medio ambiente, debido a la no utilización de producto químico en su tratamiento.

No es un tratamiento químico, se realiza introduciendo el material en una cámara con atmósfera libre de oxígeno y a altas temperaturas, próximas a la zona de combustión, durante varias horas.

Este profundo cambio en la estructura de la madera elimina los nutrientes de la madera, y reduce la absorción de humedad dejando sin alimento a los hongos.

Este tratamiento tiene grandes ventajas, la madera termotratada adquiere unas características específicas que le confieren un carácter muy particular.

Mejora la estabilidad y reduce la tendencia natural de la madera a torcerse, hincharse o encogerse dependiendo de la humedad, como mínimo en un 50% más estable que la madera sin tratar, y muy resistente a la intemperie.

Aumenta la resistencia a la absorción de humedad, la madera termotratada acumula 4 veces menos de agua en comparación con la misma madera no tratada.

La madera adquiere una tonalidad marrón homogénea en todo su grosor, y tanto la albura como el duramen quedan tratados.

La resistencia a la intemperie de la madera termotratada es aproximadamente 22 veces superior que la de las maderas no tratadas, se puede considerar un “grado III”

Elimina toda la resina de la madera, evitando la salida de depósitos de resina.

Se reduce la densidad lo que la hace más ligera.

No es un tratamiento adecuado para las termitas ni es resistente a los rayos UV

Hay que tener en cuenta que la madera sufre una pérdida de propiedades mecánicas, por lo que no apta para uso estructural.

Este tipo de madera puede ser utilizada para cualquier uso interior o exterior, revestimientos, tarimas, mobiliario, vallas, ventanas, puertas, etc

Las especies de maderas más utilizadas son el Álamo, Haya, Fresno, Pino, Abeto, Chopo, Abedul, y Arce.